En los partidos políticos de ultraderecha no existe la democracia interna y
menos la autocrítica bajo la amenaza de guillotinar a quienes digan o
conspiren contra el caudillo que está de vacaciones y así lleva años. La tropa
tan solo puede desmelenarse en la cantina, aunque, ya no cantan “El Cara
al Sol”, ni gritan viva el jefe.
Ahora conspiran contra el caudillo Abascal sin
caballo. Tras los malísimos resultados electorales del 23 de julio, se ha
escondido a la espera de que pase la tormenta mediática y de calor del
verano del 23, sabiendo que no será vicepresidente de Feijóo, ni tendrá
ministros ni directores generales que mangonear, todo en masculino. A los
amigos que les había prometido algún puesto de asesor de asuntos sin
importancia, nombrados a dedo para vivir a costa del erario público, han
desaparecido y se han cambiado de chaqueta. Todo ha pasado por vender
la piel del oso antes de matarlo.
No tienen democracia interna y sí una disciplina militarista, jerarquizada y
no cabe el debate interno de este grupo político, solo vale para cuando se
está en el poder absoluto. En democracia se debe aceptar la realidad de los
hechos y los votos del 23 de julio no suman, las españolas y españoles le
han dicho al eje del mal: Feijóo y Abascal, que NO es NO.
Utilizan la democracia hasta alcanzar el poder, solo con observar los pactos
de la vergüenza en ayuntamientos y comunidades autónomas esta la
prueba del desmantelamiento de las normas que protegen el feminismo, la
diversidad y establecen el retroceso en la igualdad entre hombres y
mujeres, más los recortes en pluralidad, transparencia y la diversidad,
aplicando principios de tiempos pretéritos, el nacionalcatolicismo
inhumano y sectario.
El problema seguirá cuando el caudillo llegue del descanso, después de
tantas vacaciones, y baje del caballo al grito de: “a mí la tropa”, la tropa no
responde porque no habrá tropa para sujetar el caballo. La realidad les
ciega y no quieren ver los hechos acaecidos tanto para el PP como Vox,
nadie quiere cuentas con ellos antes y después de los “Pactos de la
vergüenza del eje del mal”. La ultraderecha está en decadencia y esta
siendo absorbida por sus camaradas de la derecha, tras la derrota
contundente en las urnas, las españolas y españoles han dicho que no, al
eje del mal Feijóo y Abascal, no les quieren en el Gobierno de España, las
palabras que se desprenden de las urnas son claras, váyanse y dejen de
enredar contra España. El pueblo español lo agradecerá por el ahorro que
supone el derroche de los vividores de lo público.
La foto de Colón se queda sin protagonistas. Aquellos machotes,
hombrones, que sacaban pecho y se daban codazos por salir retratados, ya
no existen. El patriarcado y el machirulismo de la foto de Colón están
hundido.
Aunque, nos quedan a las españolas y españoles cuatro años por venir muy
duros en los municipios y comunidades autónomas que han acordado
gobernar en coalición la derecha y la ultraderecha para desarrollar el
TARDOFRANQUISMO O FRANQUISMO TARDIO, contra el municipalismo
Constitucionalista y contra las leyes Constitucionalistas progresistas
aprobadas en las Comunidades Autónomas.
Han iniciado el acuerdo territorial local y autonómico el PP/Vox contra la
violencia de género, contra el feminismo y derogando las leyes de la
memoria histórica democrática en los territorios donde más se recreó el
terrorismo fascista del franquismo, asesinando inocentes personas. Sus
familias tienen el derecho a saber dónde están los cuerpos de sus seres
queridos y los gobiernos autonómicos la obligación de colaborar y ayudar a
los descendientes para señalar la cuneta o fosa común donde están
enterrados, sus seres queridos para darles sepultura con todos los honores
que se merecen como buenos demócratas que dieron su vida por la
democracia de la II República, frente al Golpe de Estado de las fuerzas vivas.
El tardofranquismo se frota las manos y esperan a los hijos pródigos con los
brazos abiertos y la billetera llena para recoger en su seno a los falangistas,
carlistas y nacionalcatólicos que abandonaron el PP con la pérdida del
poder del azanarismo.
El dúo del mal Feijóo y Abascal tienen un pacto firmado en la oscuridad de
la noche, con su propio calendario que solo ellos saben, para acoger a la
ultraderecha y el franquismo tardío, en función de los acontecimientos y así
recuperar el espíritu aznariano y seguir trabajando contra la España plural
y diversa dañando al Gobierno de la Nación, liderado en funciones por
Pedro Sánchez, para evitar la reedición del Gobierno progresista que tanto
bueno le ha dado al pueblo español y a ESPAÑA.
El abrazo del oso no llegará hasta constituir y votar al Presidente del
Gobierno, espero y deseo que sea Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, quienes
lideren el proyecto progresista como buenos gestores para nuestra España
querida.